La vida es el regalo más preciado y la creación más divina que cualquier ser vivo pueda contemplar. Cada experiencia de vida llena de fortaleza al ser humano, para continuar frente a tantas adversidades y aunque la vida este llena de obstáculos, siempre existe una salida, y quizás una salida correcta a través de una reflexión.
En diferentes circunstancias no se valora la vida y solo cuando realmente el ser humano se enfrenta a obstáculos verdaderamente grandes, es cuando agradece y valora. Yo invito a que cada hogar forme seres con una alta calidad humana, inculcando el amor propio y el amor al prójimo a través de los valores y de la fe, aquellos que definen la identidad de cada integrante del hogar. La familia es el factor primordial frente a tanta adversidad actual.
Que no se destruyan hogares, que no se pierda la fe, que no se pierda el respeto y que se valore la vida en toda su plenitud.